Cruzado
el ecuador de diciembre, estando muy próximo el fin de 2022,
Gregorio - como en años anteriores- nos convocó para una nueva aventura con
celebración incluida. Son fechas entrañables que merecen ser celebradas.
Celebramos - entre otras muchas cosas - la oportunidad que la vida nos ofrece
de poder seguir disfrutando de marchas por la montaña en tan grata
compañía.
Gregorio,
para esta ocasión, nos citó en el Valle de la Barranca. La
Barranca, como comúnmente se denomina, es una zona preciosa -bálsamo para los sentidos- de
la sierra de Madrid, en el Parque Regional Cuenca Alta del
Manzanares, Reserva de la Biosfera desde 1992.
Entre las múltiples formaciones pétreas que
salen a nuestro encuentro en el paseo destacan el gran Dinosaurio y el Tiburón.
El Dinosaurio.
Para llegar al Dinosaurio hemos de sortear jaras, brezos
y matorral en continua ascensión; es el punto más alto de la marcha: parece que
nos está esperando. Es un risco muy curioso y relativamente grande que parece
mirar a la Maliciosa. Se encuentra en un lugar espectacular, que nos recuerda
mucho a la Pedriza.
El Tiburón.
Esta formación pétrea está más escondida y no muestra un porte tan destacado como el mencionado Dinosaurio.
Pasado el Tiburón iniciamos el descenso,
muy bien señalizado; en el mismo, sale a nuestro paso un singular enebro.
El descenso está bien señalizado con
hitos de piedra, se pasa por el Embalse de la Maliciosa y los últimos 2 km son
por un cómodo (cuanto aburrido) camino que lleva al parking.
Disfrutamos de una bella y cómoda ruta de senderismo apta para todos los públicos y de gran belleza paisajística.
- Tipo de Recorrido : Circular
- Distancia : 9 km aprox.
- Dificultad : Fácil.
- Tiempo total. 4.09 m.
- Tiempo en
movimiento : 1h,48m.
- Tipo de firme : Sendas y campo a
través pequeño tramo.
- Desnivel acumulado de subida : 543
metros aprox.
- Cota mínima : 1.239 metros
- Cota máxima : 1.719 metros
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